Objeto metálico de uso religioso, utilizado para contener los pétalos que eran esparcidos en las procesiones religiosas. Recipiente de planta circular, con paredes altas de formato cilíndrico, en cuyo borde superior se curvan hacia afuera formando un amplio borde lobulado. posee un asa articulada y con forma de arco, coronada por una flor superpuesta. Su decoración está compuesta en base a motivos vegetales. La base del recipiente, elaborada en filigrana de plata, está decorada con motivos vegetales simétricos, ubicados radialmente desde el centro, en donde se ubica una esfera de plata fundida. En las paredes del recipiente la decoración de filigrana está conformada por dieciséis franjas rectas, separadas entre sí en el sector de la base y uniéndose en el borde superior, curvándose hacia afuera, terminando cada uno de ellos en un pétalo. Todos están decorados con motivos vegetales simétricos, que rematan en la zona del borde con una circunferencia de filigrana, decorada con una esfera de plata fundida. El asa es de filigrana de plata y se encuentra soldada por sus bases a bisagras que su vez se encuentran unidas al borde superior del contenedor. El asa completa posee diseños con forma de hojas espejadas que decrecen en tamaño hacia la base. El arco va coronado en la zona central, por una flor de filigrana de plata de tres niveles de pétalos: la base tiene seis pétalos dobles y planos, sobre estos hay otros seis pétalos dobles planos más pequeños, y en el nivel superior hay tres pétalos dobles curvados hacia arriba. El cuerpo del recipiente se eleva sobre una decoración circular de filigrana de plata, que está constituida por un borde de varios pétalos apuntados levemente curvados hacia afuera.